¡Hola lector@s! Lo primero mis disculpas por este pequeño retraso en traeros las novedades de esta jornada del torneo, pero lo primero es lo primero y eso son Clicka y el magnífico aniversario que acabamos de celebrar del que, como no podía ser de otra manera, os daremos los correspondientes detalles en una próxima entrada de este blog.
Y tras el segundo fin de semana de descanso el 6 Naciones volvió a lo grande con lo que se presumían tres partidazos y vaya si lo fueron. Empezamos el sábado con el duelo entre Italia y Escocia en un abarrotado Estadio Olímpico de Roma, con un público motivado por las buenas actuaciones recientes de los azzurri. Los del cardo salieron con mucha fuerza pero los italianos nunca perdieron la cara al encuentro, llegaron al intermedio bien cerca en el marcador y se impusieron con claridad en la segunda parte para llevarse una merecida victoria como locales, algo que no conseguían desde 2013. Los caledonios vuelven a decepcionarnos cuando al inicio del campeonato partían como claros candidatos al título, y el nuevo entrenador de los transalpinos ha aprovechado perfectamente los mimbres que se veían asomar y los ha puesto a un nivel muy alto que les permite competir con cualquiera. No había más que verles celebrar la victoria todos juntos: los que estaban en el campo, los que estaban calentando, los del banquillo...
El sábado continuó con el duelo más esperado del fin de semana y que enfrentaba a Inglaterra e Irlanda. Los verdes partían como favoritos a la victoria tras los buenos encuentros realizados en las tres primeras jornadas y las dudas y debilidades mostradas por los de la rosa. Los irlandeses, sin desplegar el juego espectacular de las últimas citas llegaron al descanso por delante pese al buen hacer y el esfuerzo de los ingleses. Tras la vuelta de los vestuarios se esperaba que los del trébol se impusiesen con mayor claridad pero Inglaterra se mantuvo firme, bloqueando cualquier iniciativa rival y llegándose a unos últimos segundos dramáticos con una escasa ventaja de dos puntos para los de verde que vieron como se desvanecía gracias a un magnífico drop del apertura inglés con el tiempo ya cumplido y que daba una merecida victoria a los locales. Se despide así Irlanda de la posibilidad de encadenar dos Grand Slam seguidos, aunque siguen encabezando la clasificación y por tanto siendo favoritos para llevarse el torneo, sin duda uno de los más igualados de los últimos años.
Y acabamos la jornada con el duelo del domingo entre Gales y Francia. El combinado galo estaba obligado a lavar la pobre imagen ofrecida hasta el momento y para ello tenía que imponerse a un quince del puerro que contaba sus partidos por derrotas. El asunto ciertamente no empezó muy bien para Les Bleus cuyos inexplicables fallos defensivos contrarrestaron su ataque rápido y dinámico que recordaba al de tiempos no muy lejanos, y ello dio margen a los dragones para llegar al descanso parejos en el marcador. Pero debió haber charla intensa en el vestuario porque tras la reanudación fue precisamente la defensa francesa la que se impuso y ello permitió a los de azul llevarse una holgada victoria. Bálsamo de tranquilidad para Francia y peligro para Gales que ven como pueden acabar este torneo sin una sola victoria pese a la buena imagen que han ofrecido en casi todos los partidos. Como anécdota comentar el atropello francés que sufrió el árbitro; consecuencia: risas, disculpas y melé para los galos:
Estos son los resultados de la cuarta jornada:
Y el próximos sábado no es un sábado cualquiera ya que es el Supersábado, que como ya sabéis significa que se jugarán todos los partidos de la jornada el mismo día, y esta vez con mucho por decidirse: ¿quién se llevará el torneo? ¿qué nos deparará Le Crunch? ¿evitará Gales la cuchara de madera? Estad atentos porque aquí lo comentaremos todo.
Por cierto, con esta entrada llegamos a las 100 caps de la etiqueta Rugby. ¡Gracias a tod@s por vuestro apoyo que sin duda ha sido imprescindible para llegar tan lejos!
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