Pues me temo que sí, que ya es septiembre y debemos volver a la rutina... Además este año septiembre me trae una desagradable novedad y es que, por primera vez en 7 años, tengo un alumno suspenso y eso rompe todas mis magníficas e incólumes estadísticas, ¡maldito!. Como podéis ver, estoy enfadadísima con él y pasé el examen gruñendo con el ceño fruncido (spoiler: tras corregir el examen, resulta que ha obtenido notable, lo cual refuerza mi hipótesis de que el kekito sólo era un vago que había suspendido para fastidiarme, grrrrr):
En cualquier caso, resulta agradable reencontrarse con compañer@s aunque, eso sí, manteniendo aún los "grupos burbuja" para el café. La buena noticia es que nuestro alumnado empezará el curso ya plenamente vacunado y podremos estar ligeramente más tranquilos:
Y como el resto de la semana no hay mucho más que hacer, claustro inicial aparte, aprovecharé para la tradicional puesta a punto de la casa: abastecer la despensa, diseñador los pasaportes gourmet de la nueva temporada, limpiar el congelador, etc.:
¿Y dónde está Click? Pues en el despachín, trabajando duramente y también un poco enfurruñado porque ya se le ha acabado el horario de verano. ¡Qué fastidio! Aunque un paseo por la feria medieval de Ávila de este pasado finde, muy bien adaptada a la situación pandémica, le sentó la mar de bien para despejarse (las rosquillas de limón que compramos también ayudaron un poquito, jeje):
Y vosotr@s, ¿qué tal habéis empezado septiembre? ¿Tenéis alguna pequeña excursión planificada para estos días?
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